Esta clásica fragancia nació en 1927 y aún continúa su legado
Fue en el año 1927 cuando Jeanne Lanvin pidió al perfumista francés André Fraysse que crease un perfume único para el 30 cumpleaños de su hija Marie-Blanche.
Esta colaboración dio lugar a Arpège, un aroma floral con jazmín, vainilla e ylang-ylang que ha perdurado como una de las fragancias más míticas de la maison, según publica la edición francesa de Vogue Ahora se cumplen 85 años de su nacimiento, y su leyenda continúa viva, además de su ‘packing’ negro y dorado, que se abre dando lugar al misterioso frasco que habita en su interior, y cuyo relanzamiento tendrá lugar a partir de febrero de 2013.
