Para mantener un cutis sano solo necesitas seguir unos sencillos pasos…
El primero es la limpieza de cutis. Esto ayudará a eliminar todas las impurezas del rostro provocadas por el ambiente. La limpieza de cutis es muy importante ya que hay suciedad que el agua sola no puede eliminar. Además la limpieza ayuda a eliminar las células muertas y prepara la piel para recibir las cremas hidratantes. Debes elegir cuidadosamente el producto con el que realizas la limpieza.
El paso siguiente es la tonificación, la cual ayuda a mejorar imperfecciones y cierra los poros abiertos. Además, la tonificación prepara la piel para recibir cualquier tratamiento posterior. Al aplicarlo debes realizar suaves golpecitos sobre el rostro.
El último paso es la humectación y nutrición. Esto ayuda a la piel a conservar la humedad natural, aportando agua y nutrientes. Dependiendo de tu tipo de piel debes elegir la crema humectante que te aplicarás. Si tu piel es muy seca y con excesivas arrugas debes optar por una crema que sea altamente nutritiva. Para emplear estos tipos de crema debes realizar masajes ascendentes y dejar secar sin enjuagar.
