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Seguro que lo has oído mil veces, “la primera impresión es la que importa”. No me gusta ser tan contundente pero es cierto que la primera impresión es muy importante, y más en una entrevista de trabajo, donde generalmente hay poco tiempo para hablar/demostrar tus aptitudes y muchos candidatos para el puesto.
Es por ello que es fundamental intentar que la primera impresión sea lo más positiva posible. Os voy a citar algunos consejos cosméticos que os pueden ayudar a la hora de enfrentaros a ellas (recordad que es a modo orientativo y que se debe adaptar al tipo de trabajo que vas a realizar, no es lo mismo un banco que un bar musical).
1. El perfume: nunca debe ser muy intenso. Recomiendo los olores a limpio, atalcados o suavemente florares.
2. El peinado debe estar muy pulido, si tienes el pelo largo mejor recogido, sencillamente, nada de moños imposibles. Si tenemos el pelo teñido cuidado con las raíces, mechas…
3. Los ojos no deben estar muy recargados de sombras. Lo ideal sería una sombra avainillada por todo el ojo y una más blanco hueso para el lagrimal y debajo de la ceja que iluminará la mirada (también puedes usar otros tonos, pero siempre preferiblemente claros). Si usas eyeliner no muy marcado.
4. Los labios mejor en tonos nude o naturales. Si te gusta mucho el rojo opta por un maquillaje natural y un rojo discreto. Aunque es mejor prescindir de él ese día.
5. Las uñas no deben tampoco llamar mucho la atención. Opta por una manicura francesa o unas uñas cortas y cuidadas, pintadas con colores claros. Las estridencias y colores de fantasía mejor dejarlo para otro momento.
Otra cosa que deberás tener en cuenta es la depilación, tanto de cejas como de labio superior y la decoloración de la zona de las patillas si fuera necesario. Todo para dar un aspecto cuidado y limpio. Y sobretodo entra en el despacho con tu mejor sonrisa, ya que recuerda: “la primera impresión sí importa”
