Cada vez que te enfrentas al espejo es siempre la misma historia. Recuerdas a las bonitas modelos y celebridades con cuerpos perfectos que desfilan contínuamente por televisión y claro, cuando te ves a ti te encuentras fea, horrorosa, tal como si nuestros defectos se hubieran multiplicado por mil... ¡Peor imposible!
Eso nos pasa a todas las mujeres, pero no debería ser así. En primer lugar porque la perfección no existe: todas somos únicas y diferentes a las demás, con defectos pero también virtudes. Además, no debemos creer en las modelos irreales que nos venden la televisión y las revistas: ¿acaso nunca has escuchado hablar de Photoshop?
Dejando de lado todos esos falsos ideales de belleza, el resto depende de ti. Te presentamos algunos tips para que aprendas cómo mejorar tu imagen corporal, aceptarte y ser feliz como eres.
- Valora todo lo que puedes hacer con tu cuerpo. Si no te sientes cómoda con tu figura, haz ejercicio. Pero no sólo para adelgazar y tonificar tus curvas, sino también para adoptar un estilo de vida activo y saludable, que te ayudará a sentirte más relajada. El ejercicio sin dudas mejora nuestra autoestima. Valora todo lo que puedes hacer: desde correr, caminar, bailar, practicar spinning, gimnasia o el deporte que más te guste.
- Enfócate en lo que eres y en lo bueno que tienes. Escribe una lista de 10 cosas que te gusten de ti, considerando tu aspecto físico (tu sonrisa, tu cabello, tus manos, tus piernas, etc) y tu personalidad (eres responsable, sincera, sociable, etc). Verás que encuentras muchas más cosas de lo que pensabas. Lee esa lista con frecuencia y acuérdate de lo bueno que tienes.
- Recuerda qué es la verdadera belleza. Ser bellas es sentirnos cómodas y felices con lo que somos, es un estado mental, no el estado de tu cuerpo.
- La comida no es tu enemiga. Procura seguir una alimentación saludable, evita los atracones y por supuesto, jamás dejes de comer para adelgazar. Una buena alimentación rica en frutas, verduras y mucha agua te hará sentir bien por dentro y por fuera.
- Rodéate de energía positiva. Nada mejor que rodearnos de personas positivas, que siempre nos brindan ayuda y que nos quieren y valoran por lo que somos. Si te encuentras en un mal momento, recurre a alguno de tus seres queridos para que te aconseje y te recuerde lo importante que eres.
- Elimina los pensamientos negativos. Cada vez que se te venga un pensamiento negativo por tu cabeza, ¡cállalo! Prohibido decirnos “no tengo...” o “nunca podré...”. Piensa que nada puede detenerte y cambia los pensamientos negativos por pensamientos positivos.