El cabello en la tercera edad


Higiene personal y cuidado del cabello en la tercera edad contribuyen a tener apariencia saludable y buena autoestima. Nadie mejor que uno mismo para manejar la imagen personal, pero no sólo porque no hay otro individuo en el mundo que conozca mejor los gustos, necesidades y caprichos propios en cuestión de estética, sino porque cuidar nuestra apariencia nos da autonomía e independencia, además de que refrenda el afecto y la atención hacia uno mismo. 

 En lo que respecta al cuidado del cabello en la tercera edad, varios aspectos deben tomarse en cuenta, debido a que el cambio en la estructura de melena y cuero cabelludo tiene variaciones ocasionadas por el envejecimiento natural y variaciones hormonales que requieren consideraciones peculiares: su color se vuelve más claro, tiende a ser quebradizo, brilla menos y su cantidad disminuye. Pero no hay motivo para preocuparse. Analicemos uno a uno estos puntos para ver que no hay por qué pensar que coquetería y gusto por verse impecable se desvanecen con la edad. Canas y tintes 

La coloración del cabello se debe a los melanocitos. Con el envejecimiento, los melanocitos se debilitan gradualmente hasta que los niveles de melaninas desaparecen, dando lugar al surgimiento de las canas. Mucha gente recurre entonces a los productos para teñir u ocultar el cabello canoso. 

 Además de leer cuidadosamente el instructivo y recurrir en las primeras aplicaciones a la ayuda de algún profesional en estética capilar o de alguien que ya ha utilizado tintes, es conveniente considerar una serie de observaciones de las que dependerá en gran medida el resultado deseado, como: 

 * Largo y volumen de la cabellera. 

* La cantidad (porcentaje) de canas que su cabello posee. 

* El estado actual de su cabello. 

* El color natural de la cabellera. En particular, conviene evitar los tintes demasiado oscuros, ya que lucen muy artificiales y resaltan las arrugas; es mejor aplicar variaciones sutiles o tintes semipermanentes que cubren las canas con reflejos más naturales. 

Finalmente, hay que decir que antes de aplicar el producto se debe untar pequeña cantidad directamente en la piel del antebrazo, a fin de comprobar que no se presentará una reacción alérgica. 

 Caída y debilidad del cabello El mismo proceso de envejecimiento ocasiona debilitamiento de los bulbos o folículos pilosos en donde nace la cabellera. A esto se debe, en primera instancia, que el cabello luzca opaco, más delgado y quebradizo y, finalmente, que éste se pierda paulatinamente no sólo en hombres (donde es más notorio), sino también en mujeres. Aunque la caída del cabello o alopecia es difícil de controlar, es posible tomar medidas que permitan retrasar o disminuir el proceso, como utilizar shampoo suave, sea de uso frecuente o para cabello delicado, emplear agua fría o tibia para lavarlo, así como proteger la cabeza de los rayos ultravioleta para evitar resequedad en cuero cabelludo y cabello, utilizando gorra, sombrero o pañoleta. 

 Dieta adecuada Varios alimentos pueden ayudar a nutrir "por dentro" al cabello,por lo que es recomendable que la dieta incluya: Vitamina A. Se encuentra en leche entera, queso, pescado azul (atún y sardina), yema de huevo, brócoli, zanahoria, espinacas, pimiento rojo, calabaza y melón. Complejo B. Cereales integrales, levadura de cerveza, chícharos, yogurt natural, carne, huevos y leche, entre otros, lo contienen. Aceites grasos y zinc. Localizados en ostiones, almejas, mejillones, pepitas de calabaza, carne sin grasa, legumbres, aceite de oliva, pan integral y aceite de hígado de bacalao. 

  Corte y peinado Lo más conveniente, además de cómodo y práctico, es llevar el cabello corto, ya que de esta manera puede manejarse mejor el peinado y disimular las áreas donde sea escaso, además de que se evita el uso excesivo de fijadores y de cepillados frecuentes, con lo que sólo se consigue darle tirones y arrancarlo. alternativamente, se puede recoger con una pinza o "cola de caballo" para no dejar la melena al aire, ya que puede maltratarse y volverse quebradiza y, por ende, poco atractiva. Por último, sólo queda recordar que cualquier duda sobre estas u otras medidas deben aclararse con un estilista, y que el uso de cualquier producto de belleza que cause irritación o alergia debe detenerse de inmediato. ¡Adelante!, a rejuvenecer su cabellera.