Contar con los productos básicos en nuestro neceser es el primer paso para estar bella de la forma más fácil y rápida. Saber qué vamos a necesitar según la ocasión ahorra tiempo y evita más de un apuro en momentos especiales. El fondo de armario de belleza, ese que siempre debemos tener actualizado, es el mejor aliado para la mujer que quiere estar siempre preparada.
Antes de comprar un producto de cosmética resulta muy útil repasar nuestro neceser para saber qué tenemos, qué nos hace falta y que es necesario renovar. Para eso, lo primero de todo es hacer una limpieza en el armario de belleza: tirar lo que esté caducado o estropeado y ver qué es lo que menos utilizamos para no volverlo a adquirir. Los artículos que se consideran imprescindibles son:
- Limpiadora facial: descongestiona, limpia y calma la piel.
- Exfoliante: elimina las células muertas y deja la piel luminosa.
- Hidratante de cara: hidrata, suaviza y nutre al tiempo que revitaliza la dermis.
- Contorno de ojos: difumina los signos de cansancio y ojeras y alisa las arrugas y líneas de expresión.
- Corrector: atenúa ojeras, rojeces y granos al tiempo que ilumina la piel.
- Base iluminadora: para utilizar sobre el maquillaje, mezclado o solo.
- Colorete: esculpe e ilumina el rostro.
- Máscara de pestañas: realza las pestañas, las alarga y las curva.
- Lápiz de ojos: para dar el efecto deseado a la mirada según la ocasión. Sombra de ojos: permiten cambiar el look fácilmente.
- Brillo de labios: protege los labios, los hidrata y embellece.
- Esmalte de uñas: para unas manos cuidadas y atractivas.
- Hidratante corporal: Mantiene la piel más firme y elástica.
- Exfoliante de cuerpo: devuelve a la piel su aspecto más radiante.
- Desodorante: Regula el exceso de transpiración y refresca.
- Crema de manos: hidrata, suaviza y protege.
- Champú: eliminan la suciedad y reestablece el brillo y la elasticidad natural del cabello.
- Acondicionador de pelo: facilita el desenredado, elimina la electricidad estática, proporciona brillo y suavidad al cabello,
- Mascarilla capilar: según el tipo de cabello, lo nutre y suaviza. Resulta imprescindible en los cabellos muy secos y en los teñidos.