Si no tomamos medidas, los problemas circulatorios se agravan y aparecen las arañas vasculares y las varices. Es la consecuencia de una excesiva dilatación de las venas producida por un ensanchamiento de las válvulas que permiten el retorno de la sangre. Para eliminarlas se suelen emplear dos técnicas:
-LA ESCLEROSIS VASCULAR, inyección en ele interior de una vena varicosa de una sustancia esclerosante que provoca la desaparición gradual de la variz.
-EL LÁSER TRANSDÉRMICO, que ayuda a eliminar las pequeñas arañas vasculares (venitas destacadas a nivel superficial, que muchas veces solo plantean un problema estético) de forma rápida e indolora en tres o cuatro sesiones. En función de la persona, muchas veces se combinan ambas técnicas para garantizar el éxito. Solo cuando las varices son de un diámetro considerable se recurre al láser E.L.A., que requiere protocolo quirúrgico ambulatorio.
-ANTES DE QUE LLEGUE EL CALOR: Es aconsejable acudir al angiólogo durante los primeros meses del año para diagnosticar con tiempo el tratamiento más idóneo en cada caso y eliminar de forma efectiva los problemas vasculares. Piensa que lo normal es que se requieran tres sesiones y se realice una por mes. Y entre una y otra lo más frecuente es que aparezcan hematomas, además de ser recomendable el uso de medias compresivas durante varios días, algo bastante engorroso durante los meses de verano.
-AYUDA DESDE EL INTERIOR: Si tienes varices, puedes tomar a diario un suplemento de pycnogenol, un antioxidante que se obtiene de la corteza de pino marítimo. Los estudios científicos han demostrado que reduce la hinchazón, el dolor y el enrojecimiento, además de mejorar la microcirculación.
-SI TE SALEN MORETONES CON FACILIDAD: Puede deberse a varias causas, desde la fragilidad de los capilares (por diabetes, falta de plaquetas) y la ingesta de corticoides o coagulantes, hasta la falta de vitamina C o K. Para acelerar la desaparición, se puede aplicar una pomada específica o una gasa impregnada de árnica, que además es cicatrizante y ayuda a calmar el dolor. Para evitar que aparezcan, toma alimentos ricos en flavonoides (té, cebolla, manzana), vitamina C (cítricos, kiwi) y vitamina K (acelgas, espinacas y cereales integrales).