Una piel suave y cuidada es un arma de belleza infalible, y el café tiene muchas propiedades para lograrlo. Entre otras cosas, nos puede ayudar a exfoliar la piel y a retirar las células muertas, ayudando a que se vea maravillosa.
Además, el delicioso aroma del café hará que sea todavía más placentero este proceso de realizar un exfoliante casero de café, que de todas formas no debe ser usado en el rostro.
Es además una buena forma, y barata, de combatir la queratosis, que no es otra cosa que los pequeños "granitos" que algunas pieles naturalmente forman en la parte trasera de los brazos, en los glúteos, muslos y piernas.
Vamos a necesitar aceite de uvas, pero para pieles muy secas es mejor el aceite de almendras, de ajonjolí o de coco, que son más hidratantes.
Luego, necesitaremos café molido, el que usamos para las cafeteras de filtro. Aromatizaremos con un poco de canela, las cantidades no son exactas, sino hasta lograr una buena consistencia. Se puede agregar unas gotas de aceite esencial a gusto.
Luego, realizamos masajes con esponja o una toalla pequeña. Lo repetimos una o dos veces a la semana, en forma regular.
Fuente: En Plenitud