¿Cómo saber si tomo las decisiones adecuadas?


Hay veces que la vida nos puede parecer muy complicada. En ocasiones, tenemos que tomar decisiones sobre asuntos importantes y no es fácil saber cuál es la decisión adecuada. Tampoco hay unas reglas para saber si el camino que estamos llevando es el correcto, ya que, al fin y al cabo es algo muy personal. Pero sí que debemos algunos factores propios que nos guiarán a la hora de tomar decisiones tales como nuestros valores y actitudes ante temas importantes de nuestra vida. Y es que no hay decisiones malas o buenas, sino coherentes e incoherentes. 

A lo largo de nuestra vida vamos adquiriendo unos valores traducidos en formas de actuación que nos guiarán a la hora de tomar un camino u otro en nuestra vida. A partir de estos valores inculcados en nuestra educación, tendremos que tomar decisiones con coherencia, es decir, conforme a aquello que pensamos. 

Es la única manera en la que nos sentiremos a gusto con las decisiones tomadas. También es cierto que no sólo esto vale, porque podemos equivocarnos igualmente y darnos cuenta cuando ya es demasiado. Muchas veces aprendemos a tomar las mejores decisiones a base de malas experiencias. 

 La vida tiene esa manera de enseñarnos muchas veces, que aunque no es la mejor, es la más efectiva. Nuestro entorno también suele tener protagonismo en esto, dependiendo del que queramos darle, claro. Hay gente que, debido a que les cuesta mucho tomar decisiones, siempre recurren a terceros, ya sea familia o amigos. Eso está bien, ya que las opiniones de los demás nos pueden ayudar a tomar la decisión adecuada, pero siempre partiendo de nuestra propia base. 

No podemos coger el consejo de una persona y tomarlo sin pensar más, ya que cada uno es diferente y debería tomar sus propias decisiones de manera personal, aun con influencias de fuera.