De compras en busca de tu perfume perfecto.



Si estás descubriendo el mundo de los perfumes y quieres escoger la fragancia perfecta entre la gran variedad ofertada en el mercado, te recomiendo que debido a sus precios, estudies bien la situación.

La fragancia escogida ha de personificar tu personalidad, por lo que debes tomarte tu tiempo en escoger la adecuada. Por ello te proponemos algunos consejos para ayudarte a determinar cuál es tu fragancia ideal.

-Prueba y descubre nuevos olores.
Para empezar podrías hacer una lista de tus olores favoritos, este sería tu punto de partida, ya que te guiaría en averiguar el tipo de fragancia al cual debes de dirigirte. Piensa en aquellos olores que significan algo para ti, y de ahí buscar perfumes con notas similares.

-Define tu personalidad.
Si eres una persona a la que le gusta la naturalidad, salir a la calle sin apenas maquillaje y te encanta la vida al aire libre, debes optar por un aroma limpio y fresco. Pero en cambio si te gusta ser glamurosa, vestir bien e ir llamando la atención allá por donde vayas, busca un perfume que perdure por allá por donde pases, como tu personalidad. Debes escoger el perfume que más se parezca a tu forma de ser.

-Siempre prueba antes de comprar.
No te fíes de las toallitas de muestra que vienen en las revistas, ni en los probadores delos grandes almacenes o puedes auto engañarte a la hora de comprarte un perfume. Ante todo recuerda que los olores de los perfumes no solo varían de una piel a otra, sino que también cambian en el transcurso de las horas.
Así que antes de sacar tu cartera, fiándote del primer olor que has obtenido rociándote con el perfume, pide una muestra y llévatela a casa. Prueba el potencial de la fragancia unos días antes de comprometerte.

-No olvides pedir opiniones.

Si tienes alguna amiga o familiar que utilice un perfume que te llama la atención, pregúntales su opinión personal. Averigua si el perfume es demasiado fuerte, si desaparece a las pocas horas, si mancha la ropa… La elección final a la hora de escoger fragancia es tuya, pero una segunda (o tercera) opinión siempre puede serte de mucha utilidad.