Pautas para reconocer el tipo de cutis

Aunque muchas veces se habla de productos para tal o cual tipo de cutis, puede ocurrir que no tengamos claro cuál es nuestro tipo. Por ello, veamos las características de cada uno, para reconocer cuál es el nuestro.


Cutis seco: El aspecto de la piel puede ser escamosa, se notan las líneas de la piel y luce opaca. Hay sensación de tirantez, en especial si estamos al sol, por ejemplo. Los poros no se distinguen de cerca.

Cutis normal: Luce naturalmente saludable, ya que todo lo que hagamos será para "normalizar" la piel y que luzca como lo hace esta tipología. Se ve suave, ligeramente húmeda, con un brillo agradable pero no aceitoso. De cerca, se identifican los poros.

Cutis graso: La piel presenta un brillo oleoso, los poros pueden estar dilatados, y si los vemos de cerca o con aumento, obstruidos. Tiene tendencia al acné y los comedones. 

Cutis mixto: Generalmente, las mejillas se ven como el cutis seco o normal, y la zona de frente, nariz y mentón – zona T luce como el cutis graso. 

Cutis sensible: Se irrita fácilmente, por el sol o la aplicación de maquillaje u otros productos. Se enrojece, se producen eritemas. Esto podría suceder en las pieles normales, secas, o grasas.

Ahora, sabiendo bien cuál es nuestro tipo de piel, elegiremos los mejores productos para su cuidado específico.

Fuente: En Plenitud