Durante el verano hemos estado prestando mucha atención a todos los efectos negativos que sobre nuestra piel podía tener el sol y el calor, pero aunque pueda parecer lo contrario, con el frío y las calefacciones nuestra piel sufre más que nunca.
Ello es debido a que la posibilidad de que se deshidrate es mayor y por lo tanto las señales del envejecimiento en forma de líneas pueden llegara brotar con mayor facilidad, por lo que es importante cuidarnos especialmente en esta época.
Es inevitable, por tanto, que durante el invierno prestemos especial atención a poner remedios que detengan la aparición de señales de envejecimiento en nuestro rostro y que mantengan nuestra piel luminosa y joven.
Si las primeras señales de envejecimiento en nuestro rostro aparecen alrededor de los ojos, bueno es que prestemos, en primer lugar, atención a ellos y, sobre todo, si hacemos caso a aquello que los dermatólogos advierten.
Y es que según los especialistas, nunca se es suficientemente joven para comenzar a tomar precauciones con el objetivo de prevenir y tratar el problemas de las arrugas alrededor de los ojos. Para ello tanto las cremas intensivas como los serums que evitan la retención de líquido, son fundamentales.
Qué mejor forma de evitar los efectos de una larga noche sobre nuestro rostro que acentuando el resplandor del mismo. Esto es también extrapolable a las señales de envejecimiento que se pueden atenuar a través de iluminadores del rostro.
Si ya estamos prestando atención a las señales de envejecimiento en nuestro rostro y estamos intentando poner soluciones, es probable que acumulemos un buen número de cremas destinadas a paliar este problema, sin embargo debemos prestar atención a algún aspecto de esas cremas.
Esto es debido a que las cremas de dermatólogos son infinitamente más recomendables que otras ya que, en ocasiones, pueden llegar a simular los efectos de una cirugía con laser, a través de una piel firme, poros más pequeños y menos lineas de expresión.
Evidentemente uno de los grandes enemigos de nuestra piel, en general, son las manchas. Quizá la solución más rápida frente a ellas sea el uso de un bolígrafo quitamanchas de los que tenemos a disposición en cualquier tienda especializada.
Otra de las señales de envejecimiento que podemos sufrir en nuestro rostro, se apoderan de nuestros labios que pierden volumen y definición por culpa de la edad. Una solución posible es buscar las aplicaciones nocturnas que proporcionan hidratación.
Por supuesto que para detener las señales de envejecimiento en nuestro rostro, uno de nuestros principales cómplices ha de ser la exfoliación que consigue eliminar la suciedad y las células muertas que se acumulan en nuestra piel.
Por último destacar que las señales de envejecimiento se notan especialmente en el cuello y el escote, donde la piel desigual, las arrugas por culpa del sol y la falta de hidratación añaden años a nuestra apariencia.
Fuente: http://bellezaconsejos.com/
