Ejercicios de mini relajación para momentos estresantes


Aún en las circunstancias más difíciles podrás practicar alguno de estos trucos para aliviar el estrés. Son aptos para poner en práctica en el dentista, antes de entrar al despacho del jefe, en un atasco, o para atajar un ataque de nervios en medio de una discusión desagradable. 

Si tienes entre uno y tres minutos para ti, puedes poner manos a la obra: Cuando tienes un minuto Pon la mano debajo del ombligo, de manera que puedas sentir el movimiento de la tripa mientras respiras. Inspira. Has una pausa para contar hasta tres. Expira. Vuelve a parar y cuenta hasta tres . 

Continúa respirando profundamente durante un minuto haciendo pausas para contar hasta tres después de tomar aire y soltarlo. Cuando tienes dos minutos Cuenta en voz baja y despacio del uno al diez. Con cada número toma aire, inhala y exhala. Por ejemplo, inspira profundamente mientras dices diez y expira despacio. De la misma manera, hazlo con el nueve, y así hasta el uno. Si te sientes mareada, cuenta más despacio para espaciar más las inspiraciones. Cuando llegas al cero te sentirás más relajada. Si no es así, puedes repetir el ejercicio. Cuando tienes tres minutos Siéntate y tómate un descanso. Si puedes mídete la tensión arterial. 

Relaja los músculos faciales y permita que tu mandíbula se abra un poco. Relaja los hombros y deja caer los brazos a ambos lados del cuerpo. No cruces los tobillos ni las piernas, y siente tus pies pesados sobre el suelo. Ahora inspira y expira despacio.