El contacto con productos químicos, alimentación pobre en nutrientes, cambio constante de esmaltes, uñas postizas y demás pueden ser los grandes culpables por la debilidad e imperfecciones en tus uñas.
De poco valdrá ser fanática del nail art y estar siempre a la última de las tendencias si no aprendes a cuidar de las uñas, dejándolas fuertes y saludables siempre.
Uno de los principales problemas relacionados a las uñas de debilitadas es la falta de nutrientes en tu organismo.
La solución es ingerir más granos y consumir suplementos de biotina o zinc. Invierta también en esmaltes fortificantes, con silicio o hidratantes, evita productos químicos y deja de comer uñas.
Quien utiliza mucho las manos en su profesión tiende a tener las uñas desgastadas o rotas, como en el caso de los chefs, músicos o redactores.
Para dejar las uñas más resistentes, nada mejor que tenerlas muy bien hidratadas, así serán más flexibles y resistentes. Tenga siempre una crema de manos en el bolso y al lado de tu cama.
Las manchas blancas son oriundas de micosis y bacterias. En el primer caso, el tratamiento debe ser realizado con antibióticos y anti fúngicos. Ya en el caso de las bacterias, ellas tienden a desaparecer conforme la uña crece.
Si tu uña tiene el aspecto ondulado de una Ruffles, puede ser debido a agresiones que impiden el desarrollo normal de la uña. Empujar la cutícula, por ejemplo, daña la raíz de la uña. Lo mejor es cambiar de manicura o ser más delicada con tus movimientos.
Si eres amante del nail art y cambia de esmalte como de ropas, debes saber que el removedor de esmaltes en exceso deja la uña opaca y áspera, causa descamación y rotura. La solución es dar un tiempo a las uñas para que se recuperen.